La Plataforma X la Honestidad (PLxH), fundada en noviembre de 2015, es una asociación apartidista y sin ánimo de lucro dedicada a promover la integridad y combatir la corrupción en todos los ámbitos de la sociedad, incluido el deportivo. A través de nuestra labor, buscamos extender estos valores al mundo de las apuestas en partidos de fútbol, asegurando un juego limpio y honesto tanto dentro como fuera del campo.

Nuestros objetivos, establecidos en la reunión fundacional en Gijón, incluyen:

  • Ofrecer soporte a quienes luchan contra la corrupción, como Ana Garrido Ramos, enfrentando las consecuencias legales de sus acciones.
  • Impulsar legislaciones para proteger los derechos humanos y combatir la corrupción.
  • Proporcionar asesoramiento permanente a nuevos denunciantes de corrupción.

En más de dos años, hemos apoyado a diversos denunciantes de corrupción, incluidos aquellos en el ámbito deportivo, resaltando la importancia de la transparencia en todas las actividades, como las apuestas en partidos de fútbol. Este esfuerzo se ve reflejado en nuestro impulso a la Ley de Protección para los Denunciantes de Corrupción, iniciativa que comenzamos en marzo de 2016.

Nuestro equipo está compuesto por denunciantes, activistas y voluntarios comprometidos con la justicia y la honestidad, incluidos aquellos que prefieren el anonimato por seguridad. Entre nuestras acciones destacadas está la presentación de querellas contra figuras que comprometen la integridad de nuestras instituciones, así como nuestra presencia en medios nacionales e internacionales, como el New York Times.

Al ser una asociación sin ánimo de lucro, todos los recursos que recaudamos se destinan a la lucha contra la corrupción y al fomento de la honestidad, valores que consideramos fundamentales también en el mundo de las apuestas deportivas. Creemos en la importancia de mantener estos principios en las apuestas en partidos de fútbol, promoviendo un entorno seguro y justo para todos los aficionados.

En La Plataforma X la Honestidad, trabajamos desde una perspectiva apartidista, convencidos de que solo así se puede luchar eficazmente contra toda forma de corrupción, asegurando que la integridad prevalezca tanto en el ámbito público como en el privado, incluido el mundo de las apuestas deportivas.